Del 4 al 10 de mayo
se desarrolló la III Semana Mundial de la Seguridad Vial con foco en los niños. Bajo el título #SaveKidsLives, la Organización de Naciones
Unidas promovió para la semana del 4 al 10 de mayo, una campaña de
sensibilización alertando sobre la vulnerabilidad de los niños en el tránsito.
Entre las escuelas seleccionadas para participar estuvo la Nº 136 de Salinas.
Acerca de la Jornada en la Escuela pudimos conversar con María Olivera, agente de la Policía Comunitaria. Este cuerpo es uno de los pilares de la ULOSEV local.
Policía Comunitaria local en 8vo. Encuentro Nacional de ULOSEV |
Notas De Salinas: ¿En qué consistió la jornada “#Niños más Seguros”?
María Olivera: La jornada se realizó en todo el mundo. Nuestros chicos de Salinas fueron seleccionados entre 50 escuelas de Uruguay para que hicieran esta representación de niños seguros.
Para eso se hizo el jueves 7 una jornada preparatoria con talleres de una hora a la cual asisten los Inspectores de tránsito Gustavo y Alejandra, con la idea de dar a los chiquilines un pantallazo de los temas de seguridad vial.
El viernes a las 8:00 de la mañana, comenzamos el taller para presentar a UNASEV Empezamos con una presentación de Power Point y la escritura de un mensaje de los niños a la comunidad acerca de cómo cuidarse, cómo cruzar la calle, cuidarse con la moto, el casco, la silla en las edades en que hay que usarla, el cinturón de seguridad etc.
Ellos tenían una lámina proporcionada por la UNASEV con el logo de “#niños seguros” para escribir su mensaje de seguridad vial.
Luego comenzaron las actividades en la calle.
En total se realizan 3 actividades al aire libre: el peatón cruzando la cebra, los chicos ciclistas y los niños conductores de vehículos. Se improvisa un volante de coche con materiales de gimnasia. Todo lo que se usó para el taller era en base a materiales que ya tenían en la escuela, Nosotros aportamos los chalecos refractarios y cascos.
Comenzaron cruzando la cebra, el semáforo, después hicieron de ciclistas, pasaron a ser luego conductores de vehículos con niños a cargo.
¡Ojo! Conductores de vehículos con sillas de acuerdo a la edad del niño transportado. Si tienen tantos meses tienen que transportar de una forma y con tantos años tiene que estar de otra.
Después les tocó hacer de motociclistas, con su casco y su chaleco. Ellos improvisaron su moto y cometían infracciones. Teníamos un inspector de Tránsito (uno de los chicos), con silbato y un gorro de inspector y era el que marcaba las faltas. Fue muy recreativo para ellos mismos y creo que fue muy enriquecedor llevarlo a la casa y trasmitirlo.
Ellos contaban que en su casa cuando salían para la escuela tienen que estar “Mamá ponete el casco”, “Mamá ponete el chaleco”. Al fin y al cabo es una forma de cuidarnos.
NDS: ¿Qué edades tenían los niños que participaron?
MO: En la jornada participaron niños de 5to. y 6to. año, 25 de cada turno con la debida autorización de los padres. Participaron además la profesora Noelia de Educación Física, los inspectores y Alberto Díaz, coordinador de la ULOSEV local.
La jornada terminó a las 11 de la mañana y coincidió con la salida de los niños del recreo que se acercaron al tejido que rodea la escuela, (ya que la jornada se hizo en la parte de afuera) y fueron espectadores de la actividad y preguntaban. Preguntaban qué estaba pasando, qué se estaba haciendo, por qué estaba el inspector, qué multas estaba poniendo.
Había que ver en el cruce de cebra el enojo del ciclista cuando el peatón demoraba o el enojo del conductor ante la misma situación. En una parte del cruce un niño hizo de adulto mayor con todas las dificultades que este puede tener para cruzar. Se les enseñó que ellos tienen sus tiempos y que había que respetarlos.
NDS: ¿Qué otras cosas hicieron?
MO: El taller abordó el tema de la ‘educación de los padres” es decir que los niños trasmitan la experiencia a sus padres, invitándolos a jugar rol de adultos en este tema.
“¿Para qué me voy a poner el caso si voy a la esquina?” Preguntaba un niño en rol adulto Y otro le respondía… “De aquí a la esquina te pueden pasar tantas cosas, podés agarrar un pozo, te puede correr un perro”. Todo esto espontáneamente. Basaban sus respuestas en el taller que se había dado el día anterior.
En particular estos chicos que participaron ya vienen desde hace años dando el tema de seguridad vial. Se les han dado muchos talleres, y fueron pre-seleccionados por la profesora de Educación Física que dio un gran impulso para realizarlos.
NDS ¿Se van a hacer estos talleres en más escuelas, una vez pasada la semana especial?
MO: Se está proyectando, pensamos que sí porque hay mucha demanda de que se hagan ya que hay una especial problemática de salida en las escuelas.
NDS: ¿Cuentan con algún tipo de material?
MO: Sí, hay material que UNASEV nos envía. En realidad la UNASEV siempre está enviando material.
NDS: Bueno… ¿Qué sensación te quedó después de la jornada?
MO: La charla fue muy enriquecedora. Muy agradable. Trabajar con chiquilines para mí es lo máximo. Los chicos siempre te enseñan algo. Más allá de que nosotros estemos para enseñarlos a ellos, nosotros aprendemos un montón de cosas. Aprendemos el valor que ellos le dan a la vida.
Hay chiquilines que se habían caído de la moto y mantienen el miedo de volver a subir. Ya no quieren venir con el padre y buscan otras alternativas entre ellos para no exponerse. Hay hermanos por ejemplo que primero se hace llevar uno y el otro espera para que lo vuelvan a buscar más tarde. Ellos tienen miedo. No es el caso de todos pero hay muchos que sí.
Ellos demuestran su miedo pero también demuestran su autocuidado. Hay otros niños que son más revoltosos. Por ejemplo al subir al ómnibus.
En los talleres se enseña cómo ponerse la mochila cuando el niño va en el Ómnibus, y en general la conducta desde que se espera el ómnibus hasta que se desciende del mismo.
NDS: Estos temas pasaran a ser responsabilidad del Municipio… ¿Cómo lo ves?
MO: En materia de seguridad vial en la zona hay muchísimo que hacer. Lo que más preocupa son las salidas y entre turnos de las escuelas, en particular los chiquilines que son los más vulnerables.
El adulto es responsable en su situación que se genera por andar distraído o no cumplir las normas de tránsito, pero el niño no. El niño no sabe hasta donde el peligro llega. Y también preocupa el adulto mayor, obvio, cuando va a cruzar la ruta Interbalnearia. Seamos solidarios ayudemos a una persona que va muy despacio y que no mide los tiempos. Yo lo veo todos los días, el abuelo corriendo ya casi a caerse y gente en la parada que no se inmuta ante el abuelo que calculó que llegaba y no llega.
Para eso se hizo el jueves 7 una jornada preparatoria con talleres de una hora a la cual asisten los Inspectores de tránsito Gustavo y Alejandra, con la idea de dar a los chiquilines un pantallazo de los temas de seguridad vial.
El viernes a las 8:00 de la mañana, comenzamos el taller para presentar a UNASEV Empezamos con una presentación de Power Point y la escritura de un mensaje de los niños a la comunidad acerca de cómo cuidarse, cómo cruzar la calle, cuidarse con la moto, el casco, la silla en las edades en que hay que usarla, el cinturón de seguridad etc.
Ellos tenían una lámina proporcionada por la UNASEV con el logo de “#niños seguros” para escribir su mensaje de seguridad vial.
Luego comenzaron las actividades en la calle.
En total se realizan 3 actividades al aire libre: el peatón cruzando la cebra, los chicos ciclistas y los niños conductores de vehículos. Se improvisa un volante de coche con materiales de gimnasia. Todo lo que se usó para el taller era en base a materiales que ya tenían en la escuela, Nosotros aportamos los chalecos refractarios y cascos.
Comenzaron cruzando la cebra, el semáforo, después hicieron de ciclistas, pasaron a ser luego conductores de vehículos con niños a cargo.
¡Ojo! Conductores de vehículos con sillas de acuerdo a la edad del niño transportado. Si tienen tantos meses tienen que transportar de una forma y con tantos años tiene que estar de otra.
Después les tocó hacer de motociclistas, con su casco y su chaleco. Ellos improvisaron su moto y cometían infracciones. Teníamos un inspector de Tránsito (uno de los chicos), con silbato y un gorro de inspector y era el que marcaba las faltas. Fue muy recreativo para ellos mismos y creo que fue muy enriquecedor llevarlo a la casa y trasmitirlo.
Ellos contaban que en su casa cuando salían para la escuela tienen que estar “Mamá ponete el casco”, “Mamá ponete el chaleco”. Al fin y al cabo es una forma de cuidarnos.
NDS: ¿Qué edades tenían los niños que participaron?
MO: En la jornada participaron niños de 5to. y 6to. año, 25 de cada turno con la debida autorización de los padres. Participaron además la profesora Noelia de Educación Física, los inspectores y Alberto Díaz, coordinador de la ULOSEV local.
La jornada terminó a las 11 de la mañana y coincidió con la salida de los niños del recreo que se acercaron al tejido que rodea la escuela, (ya que la jornada se hizo en la parte de afuera) y fueron espectadores de la actividad y preguntaban. Preguntaban qué estaba pasando, qué se estaba haciendo, por qué estaba el inspector, qué multas estaba poniendo.
Había que ver en el cruce de cebra el enojo del ciclista cuando el peatón demoraba o el enojo del conductor ante la misma situación. En una parte del cruce un niño hizo de adulto mayor con todas las dificultades que este puede tener para cruzar. Se les enseñó que ellos tienen sus tiempos y que había que respetarlos.
NDS: ¿Qué otras cosas hicieron?
MO: El taller abordó el tema de la ‘educación de los padres” es decir que los niños trasmitan la experiencia a sus padres, invitándolos a jugar rol de adultos en este tema.
“¿Para qué me voy a poner el caso si voy a la esquina?” Preguntaba un niño en rol adulto Y otro le respondía… “De aquí a la esquina te pueden pasar tantas cosas, podés agarrar un pozo, te puede correr un perro”. Todo esto espontáneamente. Basaban sus respuestas en el taller que se había dado el día anterior.
En particular estos chicos que participaron ya vienen desde hace años dando el tema de seguridad vial. Se les han dado muchos talleres, y fueron pre-seleccionados por la profesora de Educación Física que dio un gran impulso para realizarlos.
NDS ¿Se van a hacer estos talleres en más escuelas, una vez pasada la semana especial?
MO: Se está proyectando, pensamos que sí porque hay mucha demanda de que se hagan ya que hay una especial problemática de salida en las escuelas.
NDS: ¿Cuentan con algún tipo de material?
MO: Sí, hay material que UNASEV nos envía. En realidad la UNASEV siempre está enviando material.
NDS: Bueno… ¿Qué sensación te quedó después de la jornada?
MO: La charla fue muy enriquecedora. Muy agradable. Trabajar con chiquilines para mí es lo máximo. Los chicos siempre te enseñan algo. Más allá de que nosotros estemos para enseñarlos a ellos, nosotros aprendemos un montón de cosas. Aprendemos el valor que ellos le dan a la vida.
Hay chiquilines que se habían caído de la moto y mantienen el miedo de volver a subir. Ya no quieren venir con el padre y buscan otras alternativas entre ellos para no exponerse. Hay hermanos por ejemplo que primero se hace llevar uno y el otro espera para que lo vuelvan a buscar más tarde. Ellos tienen miedo. No es el caso de todos pero hay muchos que sí.
Ellos demuestran su miedo pero también demuestran su autocuidado. Hay otros niños que son más revoltosos. Por ejemplo al subir al ómnibus.
En los talleres se enseña cómo ponerse la mochila cuando el niño va en el Ómnibus, y en general la conducta desde que se espera el ómnibus hasta que se desciende del mismo.
NDS: Estos temas pasaran a ser responsabilidad del Municipio… ¿Cómo lo ves?
MO: En materia de seguridad vial en la zona hay muchísimo que hacer. Lo que más preocupa son las salidas y entre turnos de las escuelas, en particular los chiquilines que son los más vulnerables.
El adulto es responsable en su situación que se genera por andar distraído o no cumplir las normas de tránsito, pero el niño no. El niño no sabe hasta donde el peligro llega. Y también preocupa el adulto mayor, obvio, cuando va a cruzar la ruta Interbalnearia. Seamos solidarios ayudemos a una persona que va muy despacio y que no mide los tiempos. Yo lo veo todos los días, el abuelo corriendo ya casi a caerse y gente en la parada que no se inmuta ante el abuelo que calculó que llegaba y no llega.
Posted by Notas de Salinas on Viernes, 22 de mayo de 2015
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